De policías y políticos

Hoy los ciudadanos de Los Mochis han perdido su tranquilidad. El aumento de la delincuencia ya no se da de manera aislada, como mencionaban las autoridades todavía hace unos meses.
Varios crímenes se han perpetrado y la tranquilidad de la que nos orgullecíamos se ha convertido en zozobra e incertidumbre.

¿Qué está pasando aquí?

“El efecto cucaracha”, dice el alcalde de Ahome Esteban Valenzuela García, refiriéndose a la emigración de los delincuentes como respuesta a las incursiones y permanencia del ejército y comandos federales en ciudades como Culiacán y Mazatlán.

La ciudad de Guamuchil, que igualmente gozaba de una relativa calma, también ha sido punto de refugio del crimen organizado.

Este viernes los mochitenses nos levantamos con dos noticias que pusieron en revolución a la policía municipal, la ministerial y a elementos del ejército mexicano.

Varios sujetos apostados en la carretera que conduce al ejido 20 de noviembre durante la tarde noche del jueves establecieron por unas horas un retén en el lugar.

Habitantes de ese ejido denunciaron a la policía municipal que en las inmediaciones del 20 de noviembre se encontraba un comando armado.

Al acudir las patrullas de la municipal los delincuentes se dieron a la fuga en varios vehículos y en diferentes direcciones.

La policía se fue tras la camioneta que se dirigía la ciudad y en la que viajaban los tres individuos detenidos, luego de que el vehículo donde escapaban chocó contra un auto estacionado entre las calles Guillermo Prieto e Hidalgo, en pleno centro de la ciudad.

Horas después, como a las 6 de la mañana, una patrulla de la policía municipal que hacía su rondín de vigilancia por el bulevar Macario Gaxiola, recibió una ráfaga de metralleta hiriendo a dos agentes policiacos.

Se sospecha que esto último fue en represalia de los delincuentes por los acontecimientos del día anterior, durante los cuales detuvieron a sus cómplices.

Los noticieros radiofónicos de la tarde daban cuenta de los pormenores de los acontecimientos policiacos.

Y luego se escucharon algunos comentarios de los exgobernadores Juan S. Millán y Antonio Toledo Corro.

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